'Cicatrices en la Selva' es una aventura épica basada en la historia del médico ferrolano Pablo Fernández Cartagena, Jorge Martínez, en la novela, que tiene como telón de fondo una crónica de la década de los 60-70, esencial para entender el proceso de la fallida descolonización de África.  Desde la intervención de la CIA y el asesinato de Lumumba hasta la estancia del Che Guevara, Ruiz explora las complejidades de la lucha por la libertad y la resistencia en medio de la explotación de recursos naturales. En esta entrevista, el autor reflexiona sobre el racismo, el colonialismo, el nacionalismo africano y la dolorosa realidad de la violencia como respuesta a las injusticias. Un diálogo revelador con Jacinto Ruiz que invita a la reflexión sobre la condición humana y la búsqueda de redención en el corazón mismo de la selva africana.

El Dr. Fernández Cartagena, médico ferrolano en el que se inspira esta novela, contribuyó a erradicar definitivamente la viruela en el mundo ¿Cómo llegas a esta interesante historia, absolutamente relevante,  pero tan desconocida para el gran público?

La vida de este médico ferrolano, pariente directo de mi mujer, que se enfrentó a la viruela en el Congo en los años 60 y 70, me llegó en una cena en la que su hija, Salomé, comenzó a contarme sus experiencias de infancia en África. Fui profundizando y descubrí a un ser humano, que estoy seguro que es un gran desconocido para su propia familia, me refiero para sus hermanos, sus vecinos, los amigos, todo su entorno próximo, que permaneció en esa España de los 60 y que no se pueden imaginar la capacidad que tuvieron el protagonista y todos sus colaboradores para superar enormes adversidades, en un entrono exótico, como la selva, pero lleno de violencia y de intereses que aún perduran."

La temática de la erradicación de la viruela en un contexto de guerra y aventura suena cautivadora. ¿Cómo abordaste la investigación para dar vida a esta historia basada en hechos reales?

La investigación fue un viaje en sí mismo. Me sumergí en archivos históricos, testimonios y documentos de la época. Además, tuve la suerte de hablar con personas que vivieron esos momentos, lo que añadió una capa de autenticidad única a la novela. Mi objetivo era recrear con precisión esos años y transmitir la complejidad de la situación.

¿Qué esperas que los lectores encuentren en 'Cicatrices en la Selva'? ¿Cuál es el mensaje central que buscas transmitir con esta obra?

Con 'Cicatrices en la Selva', quiero que los lectores se sumerjan en la complejidad de la condición humana. Que experimenten la valentía, la pasión y el sacrificio que pueden surgir incluso en medio de las circunstancias más desafiantes. La historia es un tributo a la resistencia humana y a la capacidad de sanar, no solo física, sino también emocionalmente.

¿Cómo describirías el proceso de escritura y el desafío de llevar esta historia a la vida?

Me sumergí por completo, durante más de dos años, en la época y en la piel de los personajes. El desafío estaba en equilibrar la emoción de la narrativa con la fidelidad histórica y, sobre todo, cubrir las lagunas de la historia personal para construir un personaje creíble. Cuando entrevisté al protagonista, ya nonagenario, que falleció en diciembre del pasado 2023, ya acusaba episodios de desmemoria. Pero, al final, creo que he logrado crear una obra que toca el corazón de los lectores y les invita a reflexionar sobre la resiliencia y la esperanza.

En esta novela, 'Cicatrices en la Selva', abordas temas profundos y complejos relacionados con la intervención occidental en África. ¿Cómo incorporaste eventos históricos como la intervención de la CIA, el asesinato de Lumumba y la estancia del Ché Guevara en la trama de la novela?

Era fundamental tejer una narrativa, junto al devenir del propio personaje, que era coetáneo de esos acontecimientos, y convivía, aunque no fuera del todo consciente, alrededor de eventos históricos que han dejado cicatrices profundas en el continente africano, como la intervención de la CIA en el asesinato de Lumumba y que en esta novela se convierten en parte integral de la trama, explorando cómo estas acciones geopolíticas tuvieron consecuencias humanas inmensurables. La estancia del Che Guevara agrega otra capa, mostrando las complejidades de las alianzas y conflictos en aquel momento. Muy poco después sería asesinado en Bolivia.

La novela también menciona el tesoro de oro de las milicias autodenominadas como 'Simbas' ¿Cuánto hay de verdad y cuánto de leyenda?

Las guerras son un negocio, cuestan vidas porque hacen ganar mucho dinero. El oro de las 'Simbas' es un elemento que podría evocar algo legendario, pero que resulta clave. En El Congo los recursos naturales son el combustible de la eterna guerra, es un país prendido en la violencia que favorece la explotación. Es un recordatorio de la interacción que existe entre la codicia y el sufrimiento humano.

Tu obra también aborda temas como el racismo, el colonialismo y el nacionalismo africano. ¿Cómo crees que estos factores han influido en el conflicto y la resistencia en África?

Son fuerzas poderosas que han moldeado la historia del continente africano de manera profunda y, a menudo, destructiva. El racismo y el colonialismo han dejado cicatrices duraderas, alimentando conflictos y desigualdades. En mi novela, intento desentrañar estas complejidades y reflexionar sobre cómo el nacionalismo africano surge como una respuesta a estas injerencias, con Lumumba, gran africanista, aparecieron los primeros desafíos internos, pero una vez más, el colonialismo neutralizó ese intento de autonomía.

El Congo es el mayor paradigma de la explotación de recursos, antes el caucho, las piedras y las maderas preciosas, ahora algo tan fundamental como el coltán y el oro ¿Cómo ves esta explotación en el contexto actual, considerando la historia de la búsqueda occidental de recursos africanos?

La explotación de recursos naturales en África ha sido una constante a lo largo de la historia, desde los tiempos del rey belga Leopoldo hasta la actualidad. La búsqueda de coltán, oro y piedras preciosas es el drama de este territorio. En 'Cicatrices en la Selva', intento arrojar luz sobre cómo esta explotación es una guerra encubierta que impacta en  las vidas de las personas

Y hablando de injusticias, la novela aborda la violación sistemática de las mujeres como botín de guerra. ¿Cómo manejas este tema sensible y por qué crees que es crucial incluirlo en la trama?

En mi anterior novela “Tres días y medio” me sumergí en la historia de las mujeres inmigrantes, anuladas, invisibilizadas y traficadas. Me sirvió como catarsis. Soy de los que piensan que la gran revolución del siglo XXI es la feminista. La violación como arma de guerra es una realidad devastadora y, lamentablemente, una parte de la historia africana. Fue crucial abordar este tema con sensibilidad para resaltar las atrocidades que enfrentan las mujeres en situaciones de conflicto. Al incluirlo en la trama, espero generar conciencia sobre esta barbarie y fomentar la reflexión sobre la urgencia, por lo menos desde Europa, de abordar estos crímenes de manera global.

Hay un pasaje en el que dos de los personajes más fundamentales debaten sobre el uso de la violencia como única forma para cambiar el mundo ¿Cómo abordas el conflicto entre el pacifismo y la necesidad de usar la violencia como forma de sublevarse contra las injusticias?

Es una dicotomía compleja. La novela reflexiona sobre la lucha interna de los personajes ante la violencia y la necesidad de resistir. La historia muestra cómo, a veces, la violencia se convierte en la única opción frente a la opresión, pero se cobra un alto precio y siempre deja secuelas emocionales y morales. Quiero invitar a los lectores a considerar las consecuencias de estas decisiones y reflexionar sobre las verdaderas cicatrices que dejan en la selva de la existencia humana.