- Marisa, ¿es el primer libro que escribes?

- No, este es ya el segundo que me publican. 

- ¿Cuál es el título del primer libro y de qué trata?

- Se titula “Si no creyera en la locura”. Es un libro de relatos cortos que no guardan relación entre sí. De corte intimista, la intención era que llevasen al lector a una reflexión. Espero haberlo conseguido con alguno al menos.  

-  ¿En dónde se puede conseguir?

- Algún ejemplar todavía vaga por internet, aunque es un libro que la editorial descatalogó hace tiempo. En la biblioteca del Ágora lo tienen, en la sección de Narrativa. 

- ¿Y este segundo libro? Cuéntanos.

 Se trata de una novela cuyo título es “Sigue, sigue, Janis”. El personaje central es Janis Poletti, una treintañera con muchos frentes abiertos. La trama abarca dos años de su vida y comienza cuando se queda sin trabajo y decide reinventarse. A su alrededor está su familia, gente muy peculiar. Además de salir adelante ha de hacer frente a un cierto misterio que la desestabiliza a veces: alguien le saca fotografías y se las envía a su dirección con una reseña en la parte interior. Aunque por lo general son versos de un conocido poema romántico, en ese contexto suenan amenazantes, al margen de que quien las envía sabe dónde vive. A Janis le gusta la literatura y lleva un tiempo estancada con una novela que parece no despegar hasta que de pronto el nudo se deshace y por fin puede continuarla. Durante la trama podemos ver adónde le conduce todo esto. 
A mí también me ha sucedido con otros proyectos, quedarme estancada, pero nada que ver con lo que he vivido con esta novela. Desde el primer capítulo ha ido creciendo con fluidez y yo he sido tan testigo de lo que sucedía en cada momento como los lectores que ya la están leyendo. Ha sido un trabajo muy interesante.

- ¿Has hecho presentaciones de “Sigue, sigue, Janis”?

- Sí, lo he presentado en el Ágora el pasado 19 de julio. El 1 de agosto también estuve en la caseta de la librería Couceiro, en la Feria del Libro de Coruña, firmando el libro.

- ¿En dónde podemos conseguir la novela?

- Aquí en el barrio en la propia librería Couceiro lo tienen a la venta, en otras zonas en cualquier librería, no tienen más que encargarlo y en breve lo recibirán. 

- ¿Cuál ha sido tu motivación para ponerte a escribir?

- Siempre he escrito, desde que puedo recordar. Cartas, artículos, relatos, nunca una historia tan larga como esta pero siempre he dedicado mucho tiempo a escribir, aunque durante una época de mi vida también a destruir la mayoría de lo escrito. Tengo un blog en el que durante un tiempo colgué entre otras cosas mis escritos de ficción. Un editor de la editorial sevillana El Desembarco lo siguió durante unas semanas y así surgió el primer libro, el de relatos, cuando me propuso publicarlos. 

La novela de Janis comencé a escribirla hace unos tres años. Tuve que posponerla cuando entré a trabajar en la oficina donde estoy actualmente, necesitaba concentrarme en la mecánica de mi nuevo empleo, pero en cuanto pude ya continué con el resto de los capítulos, de una forma muy fluida. Al término, lo comenté en un post de Facebook. Juan Mariñas, editor de Lautana Editorial, lo leyó y me preguntó si podía leerla. Con él llegamos a esta segunda publicación. También colaboro a veces en la revista de literatura de la editorial Shangrilá, los últimos artículos han girado en torno a Marguerite Duras  y Richard Ford.  

- Marisa, ¿va a  haber un tercer libro?

Sí, ya estoy en ello. Me gusta tanto el formato de los relatos cortos como el de la novela. Tengo dos proyectos a un tiempo, aunque lo difícil es encontrar precisamente el momento para ellos. A ver adónde me lleva. 

- Marisa, ¿qué más nos contarías?

- Quizá ahora es cuando siento más confianza en mí misma escribiendo, lo cual es muy gratificante. También me gustaría terminar diciendo que no tengo más que recuerdos felices de este barrio. Me sentía muy segura, como en casa. Crecí anclada a este lugar, con amigos y compañeros maravillosos con los que recientemente he vuelto a estar en contacto, tras una cena “reencuentro”. Gente que me gustaría seguir teniendo cerca ahora y siempre, todos estudiamos en el colegio Los Mallos, una mención especial para el director, el señor Salgado, tan entrañable como este barrio, que ha sido decisivo en mi vida.