Cada vez nos preocupamos más y antes por los signos de envejecimiento facial: manchas, arrugas, flacidez, etc. En la actualidad, cada vez es mayor el número de personas que se someten a tratamientos de medicina estética para retrasar el envejecimiento facial. Estos tratamientos cada vez son más efectivos, menos agresivos y tienen mejores resultados. Son tratamientos que nos evitan pasar por quirófano reduciendo los riesgos que esto supone y mejorando mucho el postoperatorio de estas intervenciones.

Además, mantienen nuestras señas de identidad intactas ya que tienen como objetivo borrar las secuelas del paso del tiempo, pero no las expresiones que caracterizan el rostro.

Las cifras hablan por sí solas: con una tendencia ascendente, casi la mitad de la población española, el 46,6% (más de 4 de cada 10) se realizó algún tratamiento de medicina estética en 2023. De ellos, el 71,8% son mujeres y el 31% hombres, mayoritariamente a partir de los 35 años de edad. A su vez, de entre las mujeres, el 49,2% ha recibido un tratamiento facial antiaging, y un 24,2% de entre los hombres.

El REJUVENECIMIENTO y ARMONIZACIÓN del tercio inferior del rostro se refiere a la mejora estética de la zona comprendida entre nariz y barbilla. Con el tratamiento de ácido hialurónico logramos CAMBIOS SUTILES en el rostro. No se trata de engrosar exagerada y grotescamente los labios o eliminar arrugas del rostro mediante técnicas que dan la sensación de “tensión”, rigidez o “congelación” antinatural de la piel o los músculos de la cara, sino que se basa en un tratamiento dermatológico con correcciones sutiles y discretamente perceptibles, que mejoran y rejuvenecen el aspecto del rostro, suavizando y difuminando los pliegues y arrugas del paso del tiempo, o perfilando y aumentando levemente el volumen de los labios, marcando ciertos ángulos de la cara, dando como resultado un aspecto más joven y atractivo de nuestra cara, teniendo además resultados inmediatos. En la consulta odontológica este tratamiento se realiza de manera indolora ya que se aplica con anestesia local.

El ÁCIDO HIALURÓNICO es un polisacárido (azúcar) con propiedades viscosas y elásticas que se encuentra en nuestro organismo y tiene una función estructural al formar parte de la piel y varios órganos. Con el paso de los años, su presencia en nuestro cuerpo va disminuyendo haciendo que nuestra piel pierda tersura, firmeza y se llene de arrugas. Su principal característica es, por tanto, su capacidad para mejorar la piel, creando una estructura que da volumen y sensación de naturalidad en las expresiones faciales. Esto es debido a que una de sus mayores propiedades es la captación de agua.

Desde finales de los años ‘90 el Hialurónico se empezó a utilizar en cosmética y estética facial con excelentes resultados como relleno cutáneo biocompatible para corregir o mejorar arrugas, surcos, líneas de expresión y asimetrías faciales, además de para dar volumen a determinadas zonas de la cara. En nuestro caso, desde el punto de vista bucal (conjunto de la cavidad oral y zona peribucal o periferia de la boca), constituye una alternativa terapéutica cada vez más empleada para la mejora y REJUVENECIMIENTO DEL TERCIO FACIAL INFERIOR complementando un tratamiento dental previo y/o simplemente para mejorar determinados signos propios de la edad y el paso del tiempo.

El odontólogo es uno de los especialistas capacitados y autorizados legalmente para indicar y realizar estas infiltraciones de ácido hialurónico en el tercio inferior de la cara, ya que es conocedor de la anatomía bucodental y facial, y sabe cómo conseguir armonía estética en el rostro. 

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