¿Ya soy un vecino más?
Les llamará la atención el encabezamiento de este escrito, pero es lo que me están diciendo algunos de mis “amigos” al saber que he dejado de tener cargos de representación, después de 60 años siempre con alguno.
La preguntita, que quiero pensar, es bonachona, me llama la atención, pues siempre he sido un vecino de Los Mallos. Si se refieren a que ya no me va a preocupar el barrio, quiero dejar muy claro que precisamente por ser un vecino más, me seguirá preocupando, pues no concibo un vecino que no esté preocupado por el lugar donde discurre su vida y la de sus amigos.
Es más, me siento respaldado y fortalecido por todo el tiempo empleado en mejorar las cosas, unas veces con aciertos y otras con fracasos pero siempre con todo el interés, por eso, como tenemos que hacer todos los vecinos: exigiré, denunciaré y pelearé. Espero que muchos de vosotros penséis igual, para que el barrio de Los Mallos, nuestro barrio, mejore en iluminación, en limpieza, en vigilancia policial, etc.
No hace ninguna falta tener una representación, para ejercer de ciudadano, nuestros derechos son sagrados y nuestra obligación es exigir y desde luego cumplir.
Feliz 2023 y por unos Mallos prósperos y habitables.