Concello da Coruña | 10/02/2018

La Concellería de Medio Ambiente abrirá en los próximos días el proceso de adjudicación de las nuevas ecohuertas urbanas de los barrios de Agra del Orzán, Eirís y Nuevo Mesoiro. La construcción de huertas en terreno municipal responde a una "histórica demanda vecinal de creación de espacios destinados a cultivos en la ciudad" al mismo tiempo que "refuerza el proceso de regeneración urbana y ecológica de la ciudad y favorece la soberanía alimentaria, el desarrollo comunitario y el fomento del consumo responsable y de proximidad", explica la titular de Medio Ambiente, María García. Podrán solicitar la adjudicación de un terreno las personas mayores de edad inscritas en el padrón municipal con una antigüedad mínima de seis meses -excepto víctimas de violencia machista que cambien de domicilio, personas emigrantes retornadas o refugiadas, que no precisan cumplir este requisito- y que no tengan deudas con el Ayuntamiento, así como centros públicos de enseñanza y asociaciones sin ánimo de lucro que tengan carácter social, pedagógico, terapéutico o ambiental. Las bases -en las que se reservan parcelas para personas mayores de 65 años, perceptoras de la Renta Social Municipal o de la Renta de Inclusión Social, con diversidad funcional y asociaciones con un fin educativo- podrán consultarse en la página web www.coruna.gal/medioambiente una vez que salgan publicadas en el Boletín Oficial de la Provincia y habrá 15 días para solicitar una parcela.

Las personas que resulten adjudicatarias tendrán autorización para disfrutar del uso de la parcela por dos años, concesión que podrá ser prorrogada por un año más, y deberán dejar el terreno preparado para una nueva adjudicataria 15 días antes de que finalice el plazo de disfrute. Tras este periodo de uso, se abrirá de nuevo el concurso de adjudicación sin que las personas beneficiarias tengan preferencia alguna. Las autorizaciones de uso tendrán carácter gratuito y no estarán sujetas a tasa, sin embargo, los gastos de conservación y mantenimiento de cada una de las parcelas y mesas de cultivo, así como de las herramientas necesarias, correrán a cargo de la correspondiente persona o entidad adjudicataria, que tendrá que cumplir también con otros deberes. Así, por ejemplo, el terreno deberá ser cultivado empleando técnicas de la agricultura ecológica -por lo que se pondrán también en marcha programas de formación vinculados a la gestión de huertas, producción ecológica y compostaje comunitario-, y las personas usuarias deberán evitar producir molestias o daños a terceras personas y cumplir con las normas mínimas de convivencia y respeto al personal municipal y otras usuarias.

El Ayuntamiento de A Coruña comenzó en el septiembre pasado la construcción de estas tres nuevas áreas huertas urbanas, que cuentan con un total de 217 parcelas. Su localización y características derivan de un proceso participativo con el vecindario, el séptimo que se abordó dentro del programa A Porta Aberta, que desarrolla la concejalía dirigida por Claudia Delso. "Las huertas urbanas de gestión ecológica son proyectos que hablan del disfrute del espacio público, de las políticas de proximidad y la protección del medio ambiente y la naturaleza", destaca la concejala.

La huerta urbana del Ágora tiene 112 parcelas y 10 mesas de cultivo y contó con un presupuesto de 115.000 euros. Está situada entre el centro municipal y la denominada Arqueta dos Frades, que se encuentra protegida por Patrimonio. Esta huerta urbana dará servicio a los barrios tanto del Agra del Orzán como de Visma, Marineros y Rosales. La ecohuerta de Eirís, que está en la parte sur del parque, tuvo un presupuesto de 125.000 euros para la definición de 77 parcelas y otras 10 mesas de cultivo. Además del barrio de Eirís, dará servicio a las zonas de Casablanca, Castrillón y Oza. Las huertas de Nuevo Mesoiro acumulan 29 parcelas y cuatro mesas de cultivo, realizadas con un presupuesto de 41.000 euros. Las tres zonas tendrán parcelas de diferentes tamaños y tipos, según el tipo de colectivo o persona usuaria. Así, los terrenos más grandes están orientados para uso de las entidades y colegios que las empleen con fines terapéuticos o educativos, con el objetivo de contribuir a inculcar valores vinculados a la agricultura tradicional y ecológica, mientras que los más pequeños tendrán uso individual. Las personas usuarias con diversidad funcional contarán con accesos adaptados.

Los tres proyectos cuentan con una serie de elementos comunes, como son un sistema de riego cómodo, con una llave cada dos parcelas, pilas de lavado para las verduras y herramientas de labranza y un cierre perimetral del recinto. También se construyeron caminos para optimizar el uso de las parcelas, almacenes para guardar las equipaciones de uso comunitario y composteros, dentro del programa municipal de compostaje puesto en marcha en el pasado año. "También habrá setos, matorrales, parterres, árboles frutales y flores, ya que nuestra intención no solo es hacer de estos unos espacios bonitos, para el ocio y el disfrute, sino también incrementar su biodiversidad, algo que es fundamental para poder desarrollar un cultivo ecológico", afirma García.