Estos ciudadanos han iniciado un acto de desobediencia civil para denunciar el hecho de que la política climática de Francia se decide en el lugar donde se encuentran las empresas que están destruyendo el planeta. La complicidad sistemática entre estas empresas, nuestro Presidente y nuestro gobierno paraliza el cambio político que necesitamos para responder a la emergencia climática. Respondemos bloqueando esta República de Contaminantes.
Todas las señales en cuanto al estado del clima son alarmantes: hay que cambiar de rumbo. Una gran bienvenida para las compañías petroleras, vía libre para los bancos, control de la política energética delegada a la industria nuclear, ayuda para la industria minera, aplazamientos del calendario a favor de la industria de los plaguicidas, cenas a la luz de las velas para los fabricantes de automóviles: nuestros políticos ya no pueden seguir anteponiendo los intereses de los grandes contaminadores a los de todos nosotros.
En lugar de tomar las medidas radicales necesarias para detener el cambio climático, Emmanuel Macron ha demostrado una y otra vez que su preferencia por las grandes empresas está por encima de la transición climática y ecológica. Al participar en esta acción de desobediencia civil y bloquear a La Défense, denunciamos la alianza tóxica entre el gobierno, el Presidente y las multinacionales contaminantes.
