España alcanzó en 2023 el récórd histórico en carencia material severa en hogares con niños y adolescentes. Casi el 11% de los más jóvenes carecen de lo necesario para disfrutar de una vida digna. Así lo demuestra el análisis que la Plataforma de Infancia ha realizado con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística.
867.000 mil niños y adolescentes se vieron afectados por la carencia material severa en 2023. En otras palabras, 1 de cada 10 niños son víctimas de esta situación. Este 10,1% del año pasado contrasta con las cifras de los anteriores: en 2015 la tasa se situaba en el 9,1% y en 2008 en el 5,5%.
La carencia de alimentos o de acceso a la energía eléctrica
En hogares con menores no había sido tan alta en nuestro país desde que se tienen registros. Más de 500.000 niños y adolescentes, el 6,9%, no pueden permitirse comer proteínas animales cada dos días. El 19,9% de los hogares con menores no pueden permitirse mantener la vivienda a una temperatura adecuada. Además, el 42,8% de los más jóvenes se han visto afectados por la falta de capacidad económica para hacer frente a imprevistos.
Galicia es la tercera comunidad autónoma donde más aumenta el riesgo de pobreza en la infancia
En el análisis de la Plataforma también se destaca el aumento del 1,7% de la tasa de riesgo de pobreza o exclusión social AROPE en la infancia con respecto al año anterior. Así, en 2023 alcanzó el 33,9%, frente al 32,7% del 2022. Un aumento que supera en 1 punto porcentual al del resto de la población, que creció en un 0,7%.
Del estudio se extraen, también, algunos factores que aumentan el riesgo de pobreza. Las familias monomarentales, numerosas, con bajo nivel formativo o con padres de origen extranjero son las que más sufren las consecuencias de este empeoramiento de las condiciones económicas.
La desigualdad también puede observarse por territorio. Las comunidades transfronterizas, como Canarias, Ceuta o Melilla, tienen un alto riesgo de pobreza infantil. Una tasa elevada que también a afecta a otras regiones como Andalucía, Murcia o Extremadura.
En Galicia, por su parte, el riesgo de pobreza o exclusión aumentó en casi un punto, alcanzando el 25%. Es menor que la media de España, pero continúa siendo alarmante. Son 96.000 menores los que viven en hogares pobres o en riesgo de exclusión en nuestra comunidad, 2.8000 más que en 2022. Estas cifras sitúan a Galicia como la tercera comunidad en la que más ha crecido el riesgo de pobreza o exclusión en la infancia.
