Un abandono evidente

Los alrededores de las Casas de Franco presentan un panorama desolador: acumulación de basura, latas, desperdicios y una sensación generalizada de dejadez. "Esto es una amenaza", afirma Pilar Castro, quien dirige la asesoría A y C en la zona. Pilar señala que no solo la suciedad, sino también la falta de comunicación del ayuntamiento, ha hecho que los vecinos y empresarios se sientan completamente ignorados.

La obra, que en teoría está bajo la gestión del Ayuntamiento, parece haberse detenido sin explicaciones claras. "Fenosa solo hizo una instalación provisional porque les dijeron que la obra continuaría, pero todo quedó parado. Ahora nos enfrentamos a esta situación sin ninguna solución a la vista", explica Pilar.

Impacto directo en los negocios locales

El abandono no es solo visual: los daños materiales y económicos afectan directamente a los comerciantes. Pilar relata cómo su local ha sufrido inundaciones debido a las deficiencias en las infraestructuras, lo que ha imposibilitado incluso las reparaciones básicas: "No puedo pintar porque el local sigue lleno de humedad y agua filtrada. Llevamos un año en esta situación, y no se ve un final cercano".

Vecinos indignados y una plataforma en espera

Los vecinos y comerciantes han protestado constantemente, pero la falta de respuesta institucional ha generado frustración. Pilar, aunque forma parte de la plataforma vecinal, admite que están a la espera de una reunión para tomar decisiones conjuntas. Sin embargo, lamenta que, mientras tanto, su negocio sigue enfrentando dificultades que en el centro de la ciudad serían impensables: "¿Crees que permitirían este estado de abandono en pleno centro? Aquí en los barrios nos tienen completamente olvidados".

Un problema que exige visibilidad

La situación en las Casas de Franco evidencia un problema estructural de desigualdad en el trato hacia los barrios periféricos. Pilar insiste en la necesidad de dar visibilidad a estas realidades: "El abandono no es sólo en estas obras; si recorres un poco más, verás que está todo igual. El ayuntamiento ni siquiera se molesta en venir a vernos".

A pesar de los múltiples obstáculos, los afectados no pierden la esperanza de encontrar una solución. "Seguimos esperando que la plataforma decida retomar las movilizaciones y que, de una vez por todas, se tomen medidas", concluye Pilar.