Me cuenta María que Dani es un gran fotógrafo reconocido internacionalmente y me acerca a sus obras expuestas en Spazo, Percibí a Dani como un ser tranquilo, sosegado y cuando comenzamos a charlar, su pasión salió como esas semillas de diente de león que él fotografía. Construye mundos de pequeños e importantes procesos de vida. Tranquilo y sosegado pero al mismo tiempo lleno de inquietud pasa desapercibido por las calles de nuestro barrio. He tenido la oportunidad de poder conversar con él para poder contar por medio de esta entrevista el trabajo de un artista. Agradezco a Dani el darme su tiempo para poder transmitir vidas con las que nos cruzamos

- ¿Quién es Daniel Agra?

- Una persona normal, nadie excepcional, una persona sencilla, amiga de mis amigos, con virtudes y defectos. Intento ser lo más humano posible y soy fotógrafo. Siempre me ha gustado el arte, la expresividad

- ¿En qué momento te interesó la fotografía?

- Siempre me gustó el arte. Un amigo hizo una definición acerca de los fotógrafos “muchas veces son artistas que han cogido un lápiz y que no saben dibujar, pero tienen una manifestación artística que quieren expresar y lo hacen a través de una cámara”. Me identifico con esta definición, a mí el dibujo artístico nunca se me ha dado muy bien, el dibujo técnico se me daba bastante mejor.

Siempre me ha gustado el arte, la expresividad, lo que la gente quiere contar con sus trabajos. Comenzó en una temprana edad, cuando tuve conocimiento de lo que era el arte y el movimiento artístico, libros de pintura, fotografía, escultura, de arte en general, acudía a museos, galerías a ver todo tipo de arte. Siempre tuve esa inquietud artística de poder expresarme de alguna manera y tal vez nació ahí, no sé, con 8 años o menos, iba por una calle y me quedaba mirando a alguien que estaba pintando, me ensimismaba viendo como hacía su trabajo, iba a lugares en donde estaba el arte, galerías etc. Siempre hubo esa inquietud artística, buscaba la manera de crear algo. La creación siempre me atrajo.

Durante unos años he estado haciendo una fotografía de amateur o no profesional y me movía en el entorno del mundo de la moda, esto me ha llevado a muchas pasarelas, a un mundo de muchas sensibilidades, me relacionaba con muchos diseñadores, me ha llevado a percibir texturas, tactos, colores, mi entorno me ha favorecido a toda esa creatividad que yacía en mí, todo ese entorno habitual me ayudó, potenció esa inquietud que estaba en mí.

En los años ochenta y noventa fui participe de ese surgimiento del movimiento Galicia Moda, viví inmerso en esa explosión, estaba totalmente involucrado, colaboré en muchísimas ocasiones con diseñadores y diversos eventos, participando de ese mundo creativo y la propia creatividad se ve potenciada.

De todo movimiento artístico que es pintura, escultura, fotografía, etc. se añade otro movimiento artístico y también cultural que es la música que estaba muy relacionada con el efecto moda, te vas enriqueciendo, bebes de muchos sitios.

- ¿La fotografía es un arte?

- Si, la fotografía es una disciplina más del arte, a veces hablamos de los grandes maestros de la fotografía del siglo pasado, que lo son por supuesto, son una referencia. Pero hoy en día la fotografía se ha democratizado tanto, que además me parece fantástico, que parece que se ha desvirtuado un poquito de lo que es el arte, pero, desde mi punto de vista hay una diferencia de lo que es una foto bonita, a cuando creas un diálogo por medio de la fotografía, ahí estas plasmando arte.

Esta democratización de la fotografía ha llevado a los profesionales a exigirse mucho más y arriesgarse a profundizar y dar otras perspectivas a su trabajo.

- ¿Qué quieres transmitir a través de la fotografía?

- Depende, puedo contar una historia que puede ser ficticia o puedo contar experiencias personales, la fotografía tiene que ser algo propio de uno o que quiere manifestar un lenguaje de una manera o que quiere contar una historia de una manera personal, incluso las propias vivencias de uno, algo importante de tu vida que lo transmites a través del lenguaje fotográfico. Lo que quiero transmitir con mi trabajo es algo que sale de mí, algo personal.

- Cuando dices “lo importante es el trabajo, lo importante no eres tú, lo importante es el proyecto” ¿qué quieres decir?

- El principio básico de la fotografía es la luz, es lo que buscamos los fotógrafos; después, a través de la luz podemos contar una historia o podemos ver un instante o un momento que a nosotros nos cuenta una historia que queremos transmitir; después está la cámara que es un aparato que tú tienes un conocimiento sobre el, tú lo manejas; y después lo importante, cuando trabajas sobre todo con series, es el concepto del proyecto, del trabajo y del diálogo que quieres transmitir. La cámara es la herramienta, lo importante es el proyecto que lanzas y lo que quieres transmitir.

- ¿En qué momento se reconoce tu obra?

- Se dio en la transición de decidir pasar de la fotografía analógica a la digital, me tomé mi tiempo y cuando decido implicarme en nuevos proyectos me doy cuenta de que la globalización da la oportunidad de exponer mi trabajo en cualquier punto del mundo y que puedan verlo y decidir si gusta o no.

Después de llevar 25 años haciendo fotografía, en el 2009 presento mi proyecto en distintos puntos del mundo, y en Londres, París, New York, Moscú, Grecia, aquí en distintos puntos de España gusta el trabajo y se reconoce dándome diferentes premios internacionales. Pero insisto, ese reconocimiento es al trabajo, al proyecto y, pues sí, lo ha hecho Dani y está bien, pero eso no es lo que tiene mucha importancia, la importancia la tiene el trabajo y el proyecto en sí mismo.

- ¿Qué trabajos recibieron esos premios internacionales?

- En general todas mis series tienen algún premio, pero las más premiadas son Abyssurbs (I y II), Asimetrías Urbanas y Gallaecia Perpetua

- ¿Como surgió el proyecto de Spazo?

- Estar en el sitio oportuno en el momento oportuno. Es un proyecto que le tenía muchas ganas, cuando miras al futuro y dices “algún día me gustaría abrir una galería de arte”. Quiero que sea un espacio expositivo, un entorno artístico y que la gente pueda salir satisfecha y que encuentre algo con lo que se pueda comunicar.

Se dieron varias coincidencias de poder tener el local adecuado, de poder hacer una inversión para reformar el local y María que también tenía esa aspiración se lo comenté y se animó a subirse al proyecto que habíamos hablado en varias ocasiones y esa ilusión que teníamos la concretamos.

Tenemos confianza en el proyecto, los artistas están encantados con el concepto y aquí trabajamos todos y todas haciendo de todo, y yo soy uno más, con mi obra, tengo mi espacio como otro artista que expone en Spazo.

El porqué y el para qué de Spazo es que los artistas se sientan cómodos y que los trabajos que traigan tengan un cuerpo de trabajo, un diálogo y en base a eso cualquier artista conocido o desconocido puede exponer.

- ¿Hacia dónde vas, Dani?

- Hacia donde me lleve mi cabeza. Mi último proyecto y el primero que presenté en Spazo que se llama Génesis, ya desde que vengo desde la fotografía analógica tuve siempre la inquietud de la luz como principio básico llevarla a un concepto más abstracto, y desde esa inquietud creé artesanalmente filtros ópticos, eso lo hago siempre que hay un cambio, esto lo hice en el 2018 y tengo varios proyectos entre mis manos, pero necesito llevarlo con calma, el trayecto es largo, eso espero y necesito tiempo y calma

El momento de proceso en la fotografía de Dani Agra

La naturaleza y lo urbano, lo conceptual han sido mi preferencia. Vas atendiendo a los detalles, haces fotografías por ejemplo sobre un diente de león y un día con un soplo de aire salen las semillas, esa explosión de semillas expandiéndose a fertilizar otros espacios y continuar un proceso de vida, ese momento es el importante para mí, ya no es aquel diente de león. Ese lenguaje de esas semillas es lo importante.

Hay una historia que contar detrás de cada trabajo. En ese momento mi naturaleza pasa a conceptualizarse a lo mejor con otras formas, pero siempre buscando otro lenguaje.

Mis proyectos fueron evolucionando, sentí que a cada fotografía tenía que tener algo personal, como si fuera mi huella personal y fui encontrando esa expresión de hacer un paisaje por ejemplo, a encontrar ese lenguaje visual que expresa lo que yo quiero contar. Ahora mis proyectos o series se convierten en 50 o 60 fotos que todas mantienen un lenguaje narrativo y un lenguaje visual para contar una historia.

- ¿Quieres añadir algo más, Dani?

- Gracias y que me gusta estar siempre en segundo plano y seguiré trabajando y aprendiendo.