Gestión del agua
OIKOS propone una Autoridad Nacional del Agua que ordene y supervise una gestión hídrica lastrada por un déficit anual de 3.000 millones de euros
En su informe El agua en España, el think tank aboga por una reforma del marco de gobernanza del agua para acabar con la actual dispersión competencial que dificulta las inversiones hídricas.
El cambio climático provoca un aumento en la variabilidad de la distribución temporal y espacial de las lluvias que aumenta el estrés hídrico de las cuencas.
- El think tank presenta un decálogo de recomendaciones entre las que se encuentran potenciar la desalación fotovoltaica o promover estrategias que alcancen el 90 por ciento de reutilización de aguas residuales tratadas.
- Entre las recomendaciones contenidas en el informe figura la necesaria renovación de redes de distribución ya que actualmente el 25 por ciento de agua suministrada para consumo humano se pierde. El 27 por ciento en el caso de Galicia.
Madrid, 18 de noviembre de 2024.- OIKOS, entidad autónoma que tiene como objetivo la protección del medio ambiente como fuente de riqueza para nuestras sociedades, propone crear una Autoridad Nacional del Agua que lidere un nuevo modelo de gobernanza y afronte los nuevos retos climáticos, lastrados por un déficil anual de 3.000 millones de euros, entre el 75 y el 85 por ciento de las necesidades de renovación de infraestructuras de nuestro país.
Su informe El Agua en España, será presentado mañana martes a las 18:30h en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, el think tank señala que reducir la dispersión competencial redundaría en una gestión más eficaz y con mayores niveles de consenso.
Así, propone una reforma profunda del marco de gobernanza que incluya una mayor racionalización de las competencias alrededor del agua, un refuerzo de las capacidades técnicas y el capital humano supervisor, así como una mejor coordinación entre los diferentes niveles de gobierno.
Esta reforma de la gobernanza pasa también por modernizar y fortalecer las confederaciones hidrográficas y por la creación de un fondo nacional que permita modernizar redes, construir desaladoras, aumentar la reutilización, así como avanzar en el impulso de otras soluciones que requieren las infraestructuras de nuestro país.
El aumento de la frecuencia de eventos meteorológicos extremos, tanto sequías como inundaciones, evidencian la necesidad de adaptarse a nuevas realidades hídricas que den respuesta al cambio climático.
“Las inundaciones y las sequías son las dos caras de la misma moneda del cambio climático y España arrastra un déficit inversor en infraestructuras hidráulicas que nos permitirían prepararnos mucho mejor frente a estos fenómenos cada vez más extremos”, explica Toni Timoner, cofundador de OIKOS y coordinador de este informe. “En muchas Confederaciones Hidrológicas, el grado de ejecución de las inversiones previstas es notablemente bajo, por debajo del 50%, para las obras y proyectos identificados como críticos para mitigar el riesgo de inundaciones” sostiene Timoner.
Pérdidas de agua suministrada: en Galicia, un 27%
Las pérdidas de agua suministrada alcanzan el 25 por ciento en España, 15 puntos por encima del objetivo del 10 por ciento considerado mejor práctica internacional.
En Galicia el porcentaje alcanza el 27 por ciento y en la última década ha aumentado en dos puntos.
El potencial de la desalación fotovoltaica en España
En su informe, OIKOS expone que la agricultura utiliza el 60 por ciento del agua consumida en España pero representa un sector clave para la economía al producir el 14 por ciento del valor económico de la producción agraria total de la UE y hasta el 23 por ciento en hortalizas y frutas.
El think tank señala la alta vulnerabilidad del regadío por su dependencia de un recurso cada vez más escaso como el agua, pero subraya su alto valor añadido y su papel estratégico como motor de crecimiento económico, de creación de empleo y de fijación de población, en especial en zonas rurales.
En este sentido, subraya que la desalación fotovoltaica puede hacer competitiva la práctica totalidad de los cultivos y señala que podría ser una solución efectiva especialmente para toda la cuenca mediterránea, permitiendo abordar de manera efectiva el grave problema de los pozos ilegales y la sobreexplotación de acuíferos particularmente en zonas con alto índice de explotación de agua.
“Con un impacto ambiental mínimo, la desalación proporciona un suministro de agua robusto, estable y seguro, siendo una tecnología consolidada y viable tanto técnica como económicamente”, añade el informe.
Decálogo de recomendaciones
Las medidas anteriores forman parte de un decálogo de recomendaciones que se completa con otras propuestas como la captación de fondos europeos para la mejora de las infraestructuras hídricas, la aceleración de la ejecución de las inversiones en ellas, el avance hacia un sistema tarifario equitativo o el desarrollo de un PERTE digital que permita una medición y análisis nacional integral de los balances hídricos.
Asimismo, propone establecer estrategias para alcanzar más del 90 por ciento de reutilización de aguas residuales tratadas, articular un nuevo Plan Hidrológico Nacional que unifique y coordine los planes de las cuencas, promover el riego por goteo y la adaptación de cultivos a las nuevas condiciones climáticas, así como desarrollar un mercado competitivo del agua desalada.
Sobre OIKOS
OIKOS es un think thank autónomo e independiente que, desde una perspectiva liberal-conservadora, busca construir un debate razonable y sensato en torno a la defensa del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.