Se presenta, además, la exposición de fotografía “Unha historia detrás de cada mirada”, protagonizada por víctimas de violencia de género, que quieren dar visibilidad a los sentimientos en conflicto vividos en sus procesos. El evento se encuentra entre las diferentes actividades, en varias ciudades del mundo, en el marco de la 2º Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia”.

Día Internacional por la No Violencia de Género

En 1981, el movimiento feminista latinoamericano establece el 25 de noviembre como día internacional contra la violencia de género. La fecha es un homenaje a las tres hermanas Mirabal (Patria, Minerva y Maria Teresa), que ese mismo dia, en 1960, fueron asesinadas en República Dominicana. Años después, la fecha es ratificada por la ONU, en diciembre de 1999.

A día de hoy, según Epdata, el 70% de las mujeres del mundo experimentan violencia de género en el transcurso de su vida. En España, en lo que va de año, 93 mujeres fueron asesinadas, por hombres. Desde el 2000, la cifra asciende a 1.079 víctimas. Según Amnistía Internacional, 137 mujeres son asesinadas a diario por un miembro de su familia.

Violencia de género en España

A pesar de la ley contra la violencia de género, el aumento de las denuncias y de las condenas, así como el establecimiento obligatorio de un protocolo de actuación, todos estos pasos no se cumplen en muchas zonas de España, por falta de medios y de presupuesto. Especialmente, en el mundo rural. Así, lo confirman profesionales del sector que trabajan en este ámbito.

La sicopedadoga Mª José Lladó, que intervendrá en el evento del próximo 23 de noviembre en A Repichoca, lleva años como sicopedagoga y agente de prevención de violencia de género en el ámbito rural. Asegura que la falta de recursos para garantizar la protección de las mujeres, víctimas de amenazas y malos tratos de su pareja o expareja, es alarmante.

Ante esta escasez de medios, explica que, ha tenido que implicarse personalmente, en más de una ocasión, para evitar más víctimas.

El último caso que recuerda fue, recientemente, en Pontedeume. Antonia, madre de un niño de 9 años. Vino a vivir a Galicia, de su país, República Dominicana, de la mano de su maltratador.  Tras salir de una paliza, en la que le propinó más de 50 puñaladas en un brazo, él le prometió que cambiar cuando llegara a España, pero no fue así. Antonia llegó a denunciarlo hasta en 7 ocasiones, pidiendo orden de alejamiento, pero la derivaban al siquiatra y le recetaban múltiples pastillas. Y las palizas continuaban. Y así, tras varios intentos para salir de ese infierno, al verse desprotegida y no poder encargarse de su hijo económicamente, volvía y volvía con él. Un día, Mª José Lladó no vio otra alternativa que encargarse personalmente de ella y de su hijo, para que no les pasara nada más. Ayudó a Antonia a conseguir los recursos, que le permitieron encontrar un espacio en el que poder vivir tranquila con su hijo. Ahora Antonia ya no tiene miedo y gracias al apoyo de Maria José ha conseguido llevar una vida normal.   

En muchos casos, estas mujeres no encuentran el apoyo de ninguna Mª José. Esa labor de apoyo y protección a las víctimas y sus hijos  deben realizarla las instituciones, las fuerzas de seguridad del Estado y los organismos encargados, según la ley. ”En muchas zonas rurales hay pocos efectivos de la Guardia Civil y no pueden encargarse de garantizar las órdenes de alejamiento, ni la seguridad de las víctimas”.

Los pisos de acogida tampoco existen en el mundo rural. Muchas de ellas se ven desplazadas a las ciudades, desarraigando a las víctimas y no a los maltratadores.

En Galicia apenas existen puntos de encuentro, para entregar a los menores, con las garantías y asistencia necesarias, según la propia ley. La mayoría de las víctimas con hijos menores acaban acudiendo a familiares o amigos, para evitarles mayores transtornos sicológicos.

Para mujeres como Mª José la solución inmediata, mientras no haya medios públicos, es que las personas se organicen, impliquen y cubran voluntariamente las carencias de las instituciones, para que no haya ni una víctima más. “Si queremos que se cumpla el  protocolo establecido por la ley en todas las zonas de España, deben dedicarse más medios y más presupuesto”.

Programación del 23N en A Repichoca

En este evento solidario se tratarán varios de estos temas, que afectan a la realidad actual de la violencia de género.

Habrá Mesa Redonda 19h-20h: Profesionales de diferentes sectores informarán sobre las siguientes cuestiones:

• Ana Pousada Gómez, (Educadora social), tratará “La socialización diferencial y su repercusión”, y hablará sobre el desarrollo de identidades de género opuestas.
• Verónica Barros Villalobos (Psicóloga social), tratará “Espacio Público y violencia de género”, es decir de las condiciones que tiene el espacio público y las implicaciones con la mujer.
• Claudia Bartolomé (Periodista),tratará “La violencia de género en los Medios de Comunicación”, errores comunes en el tratamiento de las noticias sobre este tema, desde los derechos de la mujer.
• Mª José Lladó Sánchez (sicopedagoga y agente de prevención de violencia de género en el medio rural). A través de experiencias de intervención integral en casos de violencia en el medio rural, hablará de cómo prevenirla, con acciones educativas.

Recital  Poético

Varias poetas de la ciudad harán un “Recital de poesía”, con micro abierto, en el que pueden participar los asistentes.

Las poetas Sara M. Bernard, Rilin, Lago de la Campa, Pepa Díaz, Marmo y Shadow, leerán algunos de sus textos,  y animarán a participar.

Exposición Fotografía

Bajo el título “Unha historia detrás de cada mirada”, el texto indica cómo se siente la protagonista de la imagen, tras haber experimentado la violencia de género.

Jam Session Música

Sobre las 21h habrá Jam sesión, abierta a tod@s l@s artistas que quieran incluirse solidariamente y en la que participan: New Orleans Trio (Paula Martins y Manu Gómez); Pablo Rodríguez (Kúmbal), Eloi Martínez (Percusión, Macheta);  Aarón (Ulträqäns, 3 Trebóns); Mandela, Nora Gabrieli, David López, Tana y más.

En este evento, organizado voluntariamente por Gabriela J. Gonzalez y el equipo promotor de la 2º Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia colaboran, además, Carlos Reguera, de “Mundo sin guerras y sin violencia”, el equipo de A Repichoca, Zlick producción fotográfica, Alex Rodríguez, en diseño gráfico; el fotógrafo Jacobo Ameniro, Nora Gabrieli, Lidia Montero, Mar Seoane, Emilia García, Carolina Pinedo y Manuel Cian.