El pasado Noviembre estrenaron su nuevo álbum: Lorazepam. Este trabajo, formado por 10 canciones, tiene de todo y para todos los gustos. Desde los guiños más verbeneros de “Comando sabor”, hasta el sonido más actual de “Papá Quijano”, pasando por el espacio para las letras y los ritmos más oscuros como en “Quédate”. Hoy mismo podremos disfrutar del lanzamiento del videoclip de este tema que han grabado con Volver, un grupo madrileño.

Estos dos amigos no están solos en su aventura, tienen un equipo técnico que apoya y respalda su trabajo. Con Dj Federato masterizando los temas, Alan Ponte a la guitarra y Pablo Lourido detrás de la cámara; los chicos de Lora han decidido que este es su año. La música urbana de Galicia, de España y de cualquier parte ya puede ir haciéndole un hueco a Lora porque Carlos y Chupi han venido para quedarse.

¿Quiénes son Carlos y Alejandro, más allá de esos dos chicos algo canallas y algo gamberros que forman Lora?

Carlos: A ver, no vamos por ahí adelante quitándonos la camiseta, pero siempre hemos sido muy vacilones entre nosotros y con la gente. Es una actitud que nos sale natural. A nosotros nos gusta pasárnoslo bien con la música y queríamos transmitirlo como grupo.

Chupi: Yo de los dos quizás soy el más reservado... Pero sí, básicamente somos dos chicos normales, extrovertidos a los que les gusta pasárselo bien.

¿Cómo os conocisteis?

Carlos: Bueno, esta es una historia muy romántica, pero es totalmente verdad...Chupi fue la primera persona que conocí fuera del seno familiar. Nos conocimos con 3 años y yo a Chupi fue a la primera persona que conocí en entrando en Parvulitos y desde entonces somos mejores amigos.

¿Cómo nació Lora?

Chupi: Lora nace después de diferentes proyectos que tuvimos con amigos desde que decidimos empezar a tocar juntos. Primero tuvimos una banda en la que éramos cuatro amigos... Hicimos 2 bolos creo recordar. Después hicimos otra con la intención de que fuera más seria, pero no llegó a serlo... Y entonces Carlos se enfadó y aprendió a producir. A Partir de ahí empezamos a sacar canciones nuevas.

Carlos: Yo dije: “Por mucho que sea un hobby, quiero hacer las cosas bien.” Me compré una tarjeta de sonido, un micro y un piano y a base de darme cabezazos contra una pared empecé a hacer cosas que sonaban bien. Ahí fue cuando descubrimos que Chupi tiene un talento descomunal para componer y escribir letras y a mí se me da bien la producción. Así que no dependemos de nadie, lo hacemos todo nosotros. Salvo la última masterización que se la llevamos a DJ Federato, nuestro DJ de confianza, el resto lo hicimos nosotros solos. Eso te da una libertad que es brutal. Cualquier día que nos apeteciera, así fueran las 3 de la mañana, puedes decir: “Venga, vamos a grabar esto.” Y de repente ya tienes una maqueta que suena genial. Esa libertad también fue la que hizo que siguiéramos currando como animales.

Tenéis dos trabajos publicados: Nitroglicerina (2019) y Lorazepam (2020). Se pueden escuchar algunos cambios en el sonido entre ambos trabajos. El primero parece más acústico y el segundo más electrónico... ¿Habéis realizado cambios en la manera de componer y producir en este sentido?

Chupi: Mi manera de componer cambió algo, pero tampoco mucho. Más bien fue buscando hacerlo un poco más actual.

Carlos: Nosotros partimos de hacer el estilo que nos gusta y con el que estamos cómodos y a partir de ahí intentar que pueda sonar en la radio... Que suene actual sin renunciar a lo que nos gusta. Este álbum suena mejor que el anterior porque le dedicamos más tiempo a hacerlo y llevamos más tiempo aprendiendo y más tiempo practicando. Sí que es cierto que a medida que va pasando el tiempo, a mí me va tirando más la electrónica. Así que sí que el sonido electrónico cada vez se va incorporando más y cada vez se va a ir incorporando aún más.

¿Qué artistas os inspiran? ¿Qué influencias tenéis?

Chupi: Es complicado porque yo escucho muchas cosas muy distintas. Mi proceso creativo normalmente empieza después de un día en el que escucho mucha música y después cojo la guitarra y empiezo a sacar algo. Pero grupos que me gusten y a los cuales nos gustaría parecernos... Outkast siempre me gustó porque fueron los que empezaron a hacer un rap más melódico cuando todo era bombo y caja. En el panorama actual, ahora estoy escuchando mucho a Sen Senra... Recycled J... Delaossa. La última canción que escribí, que se la pasé a Carlos el otro día, vino despues de escuchar a Antonio Vega que no tiene mucho que ver.

Carlos: Yo, a nivel producción, tengo otros artistas como puede ser Nick Murphy, que es un cantautor, pero electrónico. También XXX Tentacion que lo mataron hace unos años, era muy jovencito y tenía mucha música y muy diferente. Y el último que me caló es un tío que se llama Brakence y me volvió loco. Hacía años que no escuchaba algo que me encantase tanto. Me dio la vuelta a todo lo que yo concebía como producción.

También tenéis algo peculiar en vuestra lírica. Por ejemplo, en el caso de Chupi que parece que es capaz de meter muchas más palabras de las que en un principio parece que podrían caber. ¿Es consciente o es algo natural?

Chupi: Es lo que me sale natural. De hecho hasta fui invirtiendo esa tendencia para que las canciones no quedasen tan recargadas y dejarle más espacio a la música. Es un poco lo que nace de lo que a mí me gustaría hacer que son canciones de cantautor que se me quedaban un poco largas y las condensaba en menos tiempo para que no durasen 8 minutos. Y el acto de escribir pues depende... Vivencias de la calle no, porque evidentemente no estábamos en el parque ni haciendo esas cosas. Íbamos a la pista a jugar al fútbol sala como mucho.

Carlos: Yo llevaba a las vacas a pastar.

Chupi: Claro, somos dos chicos de un pueblo pequeño. Yo crecí subiéndome a los árboles, dándome hostias y abriéndome la cabeza. No vamos a hablar de temas que sí que salen más en el rap actual porque salen de un entorno urbano.

Sonáis a algo muy gallego. Tenéis canciones como “Comando sabor” que son pura verbena.

Chupi: Claro, nosotros fuimos dos niños de pueblo y pasamos a ser dos adolescentes de pueblo. Lo que hacíamos era coger el coche, ir a la fiesta del pueblo de al lado con el calimocho y quedarnos a dormir hasta el día siguiente.

Carlos: Lo hemos hablado mil veces entre nosotros... Si nos dan a escoger entre una verbena o una discoteca, no tenemos ni la más mínima duda de que nos iríamos de verbena siempre, siempre, siempre.

He leído que habéis dicho que la música es un hobby... ¿Significa eso que Lora tiene fecha de caducidad?

Carlos: A ver, nosotros tenemos nuestras carreras. Chupi es biólogo y yo soy arquitecto técnico. Aunque actualmente uno trabaja de teleoperador y el otro de camarero porque precisamente estamos apostando fuerte por esto. Poco a poco estamos profesionalizándolo, intentando ir un paso más allá. Para nada Lora tiene fecha de caducidad. De hecho esperamos que lo bueno empiece a llegar a partir de ahora.

Hoy estrenáis un lanzamiento del videoclip de “Quédate” con el grupo Volver. ¿Qué nos espera?

Carlos: En este álbum hicimos varias colaboraciones y una de ellas es esta con los chicos de Volver que son un grupo de indie electrónico de Madrid que son muy, muy, buenos. Además de ser muy buenas personas, son muy buenos músicos. Moló mucho grabar la canción y el videoclip con ellos. Es una canción más oscura de lo que solemos hacer y por eso pensamos que le pegaría un grupo que fuera más melódico de lo que somos nosotros. Así que contactamos con ellos y les gustó mucho la idea... Ellos hicieron un estribillo y después nos fuimos a Madrid a grabar el vídeo que es un poco loco. Estamos muy contentos con él y esperamos que os guste mucho.

Definidme Lora en pocas frases. ¿Por qué deberíamos escucharos?

Carlos: Lora somos verano, somos pueblo. Somos ir a trabajar al campo, pero sin reventarse que a la noche hay que ir a tomar un cubalibre a la verbena. Lora es para pasárselo bien y evadirse del día a día, del curro y demás.

Chupi: Somos música para bailar, si te apetece bailar. Y somos música para escuchar, si te apetece escuchar. Somos todoterreno en ese sentido.