Alias “la Trini”, de 80 años, solicitó el cambio de nombre de Antonio a Trinidad Falcés en 1953, en el registro Civil de Coruña y lo logró.

Al llegar al lugar donde se celebraban los premios, el Monty, situado en la travesía en la que, en el número 20, estaba el citado registro Civil, donde Trinidad asegura haber nacido el 13 de Mayo del 53, mete su mano en el bolso y empieza a sacar documentación antigua y un periódico en el que sale la historia de Elisa y Marcela. ”Para mi este premio significa todo, porque nunca me han dado nada en la vida. Siempre me he visto muy marginada y muy mal”, explica Trinidad.

Falcés nació en Coruña. ”Mi madre me parió en la Iglesia de Santiago, en la Ciudad Vieja y nací producto de una violación”. Además de las diferentes detenciones, Trini estuvo meses recluida en el campo de concentración de homosexuales, en Badajoz.

Emigra a Barcelona por necesidad. Pasa, allí, varios años de su vida. Pero asegura que: “A terriña tira mucho. Y cuando vi lo que estaba por venir en Barcelona, ya desde las olimpiadas, no me gustaba nada. Así que decidí volver a la ciudad en la que nadie es forastero, de donde yo soy, de Coruña”.

Con la ley de Memoria Histórica, de 2007, Trinidad Falcés fue reconocida como víctima de la dictadura. Y ahora, en 2019, con el Premio Elisa y Marcela, como ejemplo histórico de lucha por la integración y la diversidad sexual.

Premio por visibilidad LGTBIQ+ a las Drags del ¡Claro Boba!

En esta décimo quinta edición, el colectivo Alas entregó el principal reconocimiento a “la Trini”, aunque también se premió la labor del colectivo de drags, que actúa todas las semanas en el local de Coruña ¡Claro Boba!, por su aportación a la visibilización del movimiento LGTBIQ+.

La ceremonia, del 13 de junio, la presentó la periodista de Radio Coruña (Cadena Ser), Mayte González. Acudieron varios concejales del PSOE y de Ciudadanos.

También, actuó el grupo coruñés, Las Antonias, que amenizaron el acto con boleros reinventados, y reescritos con letras de empoderamiento femenino.