Testimonio

El alcohólico con negocio

Mi nombre es Alberto. Tengo 44 años y soy alcohólico. Mi llegada al grupo de AA sucede después de una borrachera de las que yo llamo "con consecuencias"....

El alcohólico con negocio
Alberto
Alberto

Porque entonces veía los problemas que me acarreaba mi forma de beber, esas borracheras en las que perdía el control, en las que quedaba al descubierto que yo tenía un problema (coches destrozados, alcoholemias, problemas con la justicia, etc.). Porque las demás las justificaba conque "todo el mundo bebe", "quién no se emborracha en una fiesta o en su cumpleaños"... Siempre tenía una excusa para beber o mejor dicho, tenía una obsesión por beber.

Mantenía cosas: una casa, un trabajo (soy albañil autónomo), una esposa, una hija (al punto entonces de entrar en la universidad). Todo aparentemente normal, pero yo no me encontraba bien; angustiado, estresado con mi trabajo, miedo a la inestabilidad económica, con un peso de la vida sobre mi. A partir de un momento bebía todos los días, porque ya no podía hacer cosas, aparecían temblores y no era capaz de llevar mías días adelante si no bebía.

En esa última borrachera salí de un portazo de mi casa tras una discusión con mi mujer (eran las 8 de la tarde y yo ya estaba bebido). Le hice pagar por mis frustraciones, incluso saqué cosas del pasado, todo valía para justificar mi manera de beber, me costaba controlar mi agresividad y salí de casa de un portazo. Después de beber durante toda la noche por los bares y pubs de mi pueblo, acabé en la calle con golpes por todo el cuerpo, la ropa sucia y rota por estar en el suelo. Había estado en una pelea sin saber con quien ni porque.

Estaba desorientado, sin poder acordarme con claridad de lo que había pasado. Sólo había bajado a tomar un par de copas para relajarme un poco y luego volver a mi casa.

Ese fin de semana, la resaca, los dolores en el cuerpo, los sentimientos de culpa por no poder controlar, por acabar así, era horrible.

Cada vez las situaciones eran más denigrantes. Por eso llamé al grupo de AA 24 Horas Coruña, desesperado por mi situación. Encontré un grupo de personas que enseguida me entendieron. Me hablaron de sus experiencias con el alcohol y me identifiqué con ellos. Me transmitieron un mensaje de esperanza, que existía una vida sin beber.

Asistiendo regularmente a las reuniones en el grupo, permanezco cada 24 horas sin beber y mi vida se ha encarrillado de nuevo.

El alcoholismo es un problema de salud, no de vergüenza. Puede tocar a cualquiera: joven, mayor, mujer, hombre, pobre, rico...

Si crees que tienes problemas con la bebida o conoces a alguien que crees que puede tenerlos, llámanos al 981 13 47 91, o ven a informarte sin obligación alguna a:

Calle Ramón Menéndez Pidal 3 bajo, 15007 A Coruña

El alcohólico con negocio