Mari Carmen Sánchez nació en Argentina, hija de padre gallego y madre argentina, emigrantes de la época de los 60 que viajaron a las Américas y que hicieron su vida allá.

Las generaciones siguientes, en está época se plantean volver y emprender una nueva etapa en esta tierra.

Las migraciones son una constante en la historia y en la vida de los pueblos. Es innato a la vida humana el conocer nuevas posibilidades, el mejorar, el aportar nuevas miradas a las culturas que reciben las migraciones. En la persona migrante reconocemos el avance histórico desde hace siglos. Ningún ser humano nos es ajeno, venga de donde venga y vaya a donde vaya.

Mari Carmen, ha venido a revitalizar el comercio de la ciudad y se le siente contenta aportar al barrio sus conocimientos y ofrecer un gran servicio desde su librería.

Mari Carmen, cuéntanos ¿quién eres?

Claro, soy María Carmen Sánchez Gómez, de nacionalidad argentina, hija de un español nacido en Curtis. Galicia es mi segundo hogar desde hace tres años y me siento muy conectada a A Coruña.

¿Habías venido a España antes de mudarte definitivamente?

Sí, vinimos en 2018. Fue el viaje de 15 años de mi hija mayor. Aprovechamos para conocer varios lugares porque estábamos tan lejos de casa. Visitamos Londres, Barcelona, París, Madrid y, por supuesto, vinimos a A Coruña a conocer a la familia.

¿Y ese viaje fue un punto de inflexión para decidir mudaros?

Exacto. Mis hijos quedaron fascinados con A Coruña y, al regresar a Buenos Aires, empezaron a insistir en la idea de mudarnos. La inseguridad en Buenos Aires era un factor determinante. Vivíamos encerrados, con rejas en las ventanas y miedo constante. Aquí, en A Coruña, la vida es mucho más tranquila y segura.

¿Cómo fue la adaptación al llegar a España?

No fue fácil, especialmente durante la pandemia. Llegamos en marzo de 2021 con muchas ilusiones y desafíos. Mi marido ya tenía un trabajo en sistemas informáticos, lo cual ayudó mucho. Yo me dediqué a los trámites y homologaciones de los chicos. Aprendí a moverme por la ciudad, conocer las rutas de los buses y poco a poco fuimos encontrando nuestra tranquilidad.

¿Cómo fue el proceso de establecer tu negocio aquí?

Fue interesante y desafiante. Mi marido vio un cartel que decía “Se traspasa” en una librería y empezamos a averiguar. Pilar, la dueña anterior, quería jubilarse y no quería que el comercio se cerrara. Con mucho esfuerzo y apoyo de la comunidad, logramos tomar el traspaso y abrir la librería en julio de 2022. Ahora, soy feliz rodeada de libros, algo que siempre me ha gustado.

¿Cómo ha sido la respuesta del barrio?

Ha sido increíble. La gente nos apoya muchísimo. Cuando cerramos la librería, aunque sea por un día, los clientes preguntan preocupados. Es gratificante sentir ese nivel de apoyo y conexión con los vecinos.

¿Cuál es tu valoración de estos dos años en A Coruña?

Es muy positiva. Hemos encontrado un lugar que nos gusta y donde nos sentimos seguros y felices. Mis hijos se manejan solos, van a la universidad, hacen amigos. La calidad de vida ha mejorado significativamente. Aunque fue un gran esfuerzo y tuvimos desafíos, todo valió la pena para vivir tranquilos y disfrutar de esta nueva etapa de nuestras vidas.