Le acompaña, en la farmacia su estimada compañera Isabel, trabajan juntas desde hace 30 años dando los cuidados a quien acude a su Farmacia. Carmen e Isabel, mujeres comprometidas, entregadas a su profesión y a vecinas y vecinos que necesitan de su atención.

Quisimos hablar en esta ocasión con Carmen, para que nos relatara su percepción y experiencia de esa situación tan extraordinaria que hemos y estamos viviendo a causa del Covid 19

Carmen, todo comenzó el 14 de Marzo, las farmacias sois uno de los sectores esenciales, por lo tanto estabais con las puertas abiertas ¿cómo fue esa experiencia?

Sí, la gente venía muy asustada, entramos en pánico. Creo que la prensa ayudó mucho a ese estado de pánico en el que vivimos, la información era muy sensacionalista, dedicándose a informar de lo peor en lo peor. Pienso que la misión de un o una periodista es dar una información veraz y educativa, informando de lo que está sucediendo verdaderamente. Vimos como cualquiera podía opinar de epidemiología sin tener ni idea, dando en muchas ocasiones información contradictoria en diversos medios. No me cabe duda que eso ayudó a ese pánico que la gente vivía.

Por ejemplo, yo tengo unas mascarillas que se utilizan para protegerse del polvo, que no sirven para protegerse ante un virus, esos días la gente me las pedía y las compraba, aún cuando yo les informaba de que esas mascarillas no les estaban protegiendo del Covid 19. Había personas que creían que el aire estaba contaminado y me comentaban de que había escuchado este tipo de cosas en la TV.

Y tú, ¿cómo lo viviste?

La sensación era muy extraña. Mi vida seguía siendo la misma, trabajo, casa… pero no pasaba lo mismo, parecía más una película de Ciencia-Ficción. Entraba en casa y los zapatos los dejaba a la entrada, lavar cara y manos con jabón antes de tomar contacto con mi familia, desinfectándolo todo, etc. Realmente hubo varios días de estar en una rueda “paranoica” y poco a poco me di cuenta y fui saliendo de ahí. Es claro que hay que tomar todas las medidas de seguridad y precaución, distancia de seguridad, más higiene y desinfección incluso que antes, pero hay que tener serenidad.

Ha sido muy intenso y la gente necesitaba hablar mucho, comentar y expresar cómo lo vivía, así que poco a poco intentamos transmitir la mayor tranquilidad que nos fue posible.

Ya estamos en plena desescalada y en Galicia en la llamada nueva normalidad, ¿cómo esta siendo esta nueva normalidad?

Si, muy variada. Están los vigilantes de las mascarillas, preparados para la crítica y culpando, las personas que lo llevan con normalidad, haciendo vida normal y los que pasan de todo. También están las personas que están teniendo miedo a salir a la calle y eso les está sucediendo a adultos, niños y mayores, están siguiendo con el confinamiento y eso no es bueno, el miedo te baja el sistema inmunológico.

Nosotras lo llevamos bien, ya está pasando esta locura, y seguimos tranquilizando a la gente y te digo que mi percepción y experiencia es que hay más gente buena y solidaria en el mundo que gente mala.